La poetisa, traductora y ensayista Nancy Morejón, (
Entre sus libros se destacan: Richard trajo su flauta y otros argumentos (1967), Piedra pulida (1986), Cuerda veloz (2002),
Su obra ha sido también reconocida en diversas partes del mundo.
Para Lorena García Buch y su hija Leyda Lombard
La primera vez cae en espiral
desde un soplo del cielo.
Oh cielo de las lluvias entrecortadas
cayendo así sobre la flecha tosca de la reja
cuya ventana espera la llegada de un hada madrina.
Su sonido es casi el llanto de un recién nacido.
Tanta sorpresa se agita en su copa de bastos.
Tanta alegría y tanto dolor secreto,
casi escondido en sus bordes de oro,
entre el fondo de un ánfora y el parabán chino de la sala.
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Desconfigurado
Para Víctor Manuel, que me ayudó a configurarlo
Yo como una ópera fabulosa
a las puertas de un teatro del Prado
que no es el Alambra sino el Diorama
de los cafés hirvientes de humo y modistillas sin destino
entrando como yo
a la rueda rueda
de su vida y mi vida como un gato
que se suelta en una ventana dormida
por eso
hoy los mares entran y salen de mis sienes y se vuelven
a aplicar y a aplicar en este teclado sueco
ya con destino vulnerable y mudo
sobre la cola de un delfín mojado
que lanzamos el pequeño príncipe Víctor Manuel y yo
al frente frío frío frío
que nos desmantela como un ciclón en septiembre.
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Mississippi
A la memoria de Nicolás Guillén
La serpiente de agua repta y se mece.
Con su cuerpo de hamaca, bamboleándose.
Carabelas, fantasmas, pieles quemadas
van dibujados sobre las hojas de los sauces.
La serpiente de agua
junto a los sauces.
La serpiente de agua.
La serpiente de agua va alzando su cabeza
con una lengua bípeda y milenaria.
Un pedazo de lengua cae en el Golfo.
El otro, devorando cientos de barcas.
La serpiente agua
entre los sauces.
La serpiente de agua.
La serpiente de agua crece y avanza
y va abriendo sus fauces
impenitentes, pálidas, voraces,
sus anillos dorados, su vaivén implacable.
La serpiente de agua
junto a los sauces.
La serpiente de agua.
2002
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Lago Waban (fragmento)
I
El árbol frente a mí
ayer apenas tenía un cuerpo
oscuro.
Unas horas de agua
bajo el cielo
y ya sus ramas
van abriéndose
como brazos desnudos
hacia todos los sitios,
hacia todos los signos
como niños mojados
suspendidos en el espacio
como esas hojas simples
que arman una corona verde
por los aires.
En el centro está el tronco,
amable y amarillo,
despojado de luces y de rayos,
balanceándose
siempre desnudo,
húmedo todavía
en espera quizás de nuevas aguas
o de otra nueva desnudez
que aquí llaman otoño.
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Filosofía de los ratos
Para Lenita, para Edith
Viene en bandadas el agua
como las golondrinas al final de mayo.
Un aguacero viene enseguida
como las golondrinas
ya entrando el mes de junio.
El agua errante calma la sed y los olores incalculables.
Marina alza su cabeza
por encima de las barandas
y un aro ámbar corona sus sienes
frente a una quieta alameda florida.
Es un domingo de visitas sin fin,
de cornetín dormido
sobre la flauta de los panes.
Marina aplaude el concierto perfecto
de una de sus nietas al piano.
Las notas del vals suben, suben y suben,
enredadas entre las tunas verdes que están
sembradas en cazuelas gigantes,
su fondo ennegrecido por un humo asombrado,
sin un asa añorada que lo pudiera acompañar.
El alma de las cazuelas baila su vals
doliente
a la sombra del ámbar
y estos ratos de espuma y terciopelo
que llegan como aguas torrenciales
sin voz y sin destino,
o como golondrinas asustadas,
prematuras y hermosas,
llegadas de una estación final
que transcurre, volátil,
ante el encanto de los veleros.
2 comentarios:
Muy bonito blog para conocer autores cubanos (para mi) desconocidos.
Gracias lo visitaré
saludos desde Buenos Aires
Buena forma de describir la vida por medio de las palabras poéticas.
funpadesha.blogspot.com
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